La carta, firmada por Ricardo Acosta, presidente de Apavit, expresa de manera contundente que la inauguración del nuevo aeropuerto, prevista para el 18 de diciembre, se dará sin que se hayan resuelto los problemas de acceso. “Estamos profundamente preocupados porque los accesos actuales no cumplen con los estándares de seguridad necesarios, lo que pondrá en riesgo tanto a los usuarios como a la imagen internacional de Perú”, señala el documento.
A medida que se aproxima la inauguración del nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, la Asociación Peruana de Agencias de Viajes y Turismo (Apavit) ha hecho un llamado urgente a las autoridades para abordar las preocupaciones sobre la seguridad en los accesos al terminal aéreo.
En una carta dirigida a los ministros de Comercio Exterior y Turismo, de Transportes y Comunicaciones y del Interior, así como a la Municipalidad y al Gobierno Regional del Callao, Apavit advierte que los accesos provisionales al aeropuerto carecen de las medidas necesarias para garantizar la seguridad de los pasajeros y la fluidez del tránsito, lo que podría impactar negativamente en la reputación del país.
La carta, firmada por Ricardo Acosta, presidente de Apavit, expresa de manera contundente que la inauguración del nuevo aeropuerto, prevista para el 18 de diciembre, se dará sin que se hayan resuelto los problemas de acceso. “Estamos profundamente preocupados porque los accesos actuales no cumplen con los estándares de seguridad necesarios, lo que pondrá en riesgo tanto a los usuarios como a la imagen internacional de Perú”, señala el documento.
Entre las principales preocupaciones planteadas por Apavit se encuentra la situación en la avenida Morales Duárez, uno de los accesos clave al nuevo terminal, donde se han instalado dos puentes provisionales que no son suficientes para el volumen de tránsito esperado. “Estos puentes no han sido diseñados para soportar la cantidad de vehículos que se estima pasarán por la zona, y no está claro si cuentan con uno o dos carriles, lo que agrava la incertidumbre”, señala el gremio.
Otro punto crítico es el acceso a través de la avenida Santa Rosa, que Apavit describe como inadecuado para manejar el tráfico hacia el aeropuerto. “Hasta que se construya el viaducto definitivo en dos años, esta avenida no tiene la infraestructura necesaria para soportar el flujo vehicular sin poner en riesgo la seguridad de los pasajeros”, destaca el comunicado.
Las largas esperas en semáforos, giros en U obligatorios y cuellos de botella son solo algunas de las complicaciones que podrían generar retrasos y frustración entre los usuarios.
Pero más allá de la congestión vehicular, Apavit advierte que la falta de seguridad en las rutas de acceso podría aumentar el riesgo de actos delictivos. “Los pasajeros que viajan al aeropuerto suelen llevar consigo documentos valiosos y dinero, lo que los convierte en un blanco fácil para la delincuencia. Sabemos que en la avenida Faucett se han registrado numerosos asaltos, donde delincuentes rompen las lunas de los autos para robar las pertenencias de los viajeros”, detalla la carta.
La situación se vuelve especialmente preocupante en las primeras horas de la mañana, cuando salen la mayoría de los vuelos internacionales. “Muchos pasajeros deben transitar por estas zonas a las 3 o 4 de la madrugada, lo que los expone aún más a ser víctimas de robos a mano armada. Este escenario es inaceptable para una infraestructura de la magnitud y relevancia del nuevo Jorge Chávez”, enfatiza Ricardo Acosta.
Además, el titular de Apavit llama la atención sobre el deterioro ambiental y visual en las zonas circundantes al aeropuerto, especialmente en los márgenes del río Rímac, donde la acumulación de basura y la contaminación son evidentes. “La imagen de Lima está en juego. Los viajeros internacionales no pueden ser recibidos por una ciudad donde el caos y la suciedad dominan las principales vías de acceso al aeropuerto. Esta es la primera impresión que tendrán, y lamentablemente, no es una buena”, agrega.
En la carta, Apavit también cuestiona la ausencia de una estación de metro que facilite el acceso al nuevo terminal, una promesa que no se ha cumplido. “Nos preguntamos por qué se dejó de lado el proyecto de una estación de metro para el aeropuerto, lo cual habría sido una solución ideal para el transporte masivo y seguro”, subraya el gremio de agencias de viajes.
Ante esta serie de problemas, exige que las autoridades tomen medidas inmediatas para solucionar los temas de seguridad antes de la inauguración. “No podemos permitir que la apertura del nuevo aeropuerto esté empañada por la falta de seguridad. Un incidente en los accesos podría generar una ola de mala publicidad que afectaría seriamente la imagen del Perú como destino turístico”, advierte Acosta.
El nuevo Aeropuerto Internacional Jorge Chávez es una obra largamente esperada que ha estado en desarrollo durante 19 años. Sin embargo, Apavit subraya que su éxito dependerá no solo de la modernidad de sus instalaciones, sino de la seguridad y eficiencia de los accesos.
“No basta con inaugurar un aeropuerto moderno si los pasajeros no pueden llegar a él de manera segura y sin contratiempos. Instamos a las autoridades a actuar antes de que sea demasiado tarde”, concluye la carta.
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